¿Sabes qué? Todo va a ir bien
Hoy sientes que el mundo se te cae encima, las ideas forjadas con el paso del tiempo se han desmoronado. Un abrir y cerrar de ojos, no tuviste tiempo ni de parpadear, no sentiste la ola hasta que el tsunami te devastó. Ahora sientes que lo único que hay en tu interior es un mar que no para de dar vueltas y arrastra, como la marea, los restos de ti misma hecha pedazos. Insensible hacia el mundo que te rodea y demasiado sensible hacia todo lo que resuena en tu cabeza.
Francamente, es jodido. Tienes la pésima impresión de estar siempre en el lugar y momento equivocados. No es fácil. No sabes cuando todo se fue a la mierda, pero está claro que las cosas han salido mal. Sin fingimientos. Se ha ido y no va a volver. Alguien que solo estará presente en tus recuerdos por culpa de disputas que ya ni siquiera comprendes.
Pero, ¿sabes qué? Todo va a ir bien.
Te lo prometo.
Mira a tu alrededor, ¡tan solo a un par de metros!, y observa la cantidad de gente que te queda por conocer y las experiencias que todavía no has vivido. Queda mucho, muchísimo por sentir. La vida se impone, pero afrontar riesgos demuestra de lo que estamos hechos.
Que vale, que sí, que igual ahora no tienes ni idea de quien eres, pero siempre puedes intentar convertirte en la persona que nadie pensaba que podrías llegar a ser. Imagina, inventa, crea y exprime cada instante. El tiempo no hace intermedios, el espectáculo continúa.
No es momento de hacerte reproches, sino de quererte, aceptarte y comprenderte. Deja que todo fluya, siéntete libre y haz lo que quieras cuando te apetezca. Solo recuerda que eres genial y que todo va a ir bien.
¡Repítetelo cada día!
