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Abajo el single shaming, arriba la sologamia

Para perturbar el remanso de paz de un soltero no se nos ocurre nada más efectivo que la famosa preguntita: Y TÚ QUÉ, ¿TODAVÍA SIN PAREJA?

El single shaming, esa práctica de vergüencita ajena que consiste en incomodar a quienes deciden estar solteros por elección propia, sigue siendo una realidad que perpetúa la idea de que la felicidad solo se encuentra en una relación romántica. Excuse me? ¿Planeta tierra llamando al siglo XXI? Por suerte, no está todo perdido, y es que la sologamia ha emergido como un poderoso movimiento recordatorio de que la verdadera plenitud y satisfacción pueden y deben encontrarse en uno mismo.

Y tú qué dices, ¿vives la soltería como una fase transitoria entre dos relaciones o como un estado de plenitud sin fecha de caducidad? Hablemos de ello sin tabúes:

¿Qué es el single shaming y cómo podemos evitarlo?

Aunque la Navidad es la época del single shaming por excelencia, vivimos en una sociedad donde la familia y la pareja siguen representando 365 días al año el no va más del éxito personal. Aquello de la vida en pareja como objetivo vital te sonará de haberlo visto en pelis, libros y series de todas las épocas y los géneros posibles, ¡pero ojalá esto fuera todo! El single shaming atraviesa pantallas y se cuela en la vida más cotidiana en forma de packs familiares de productos frescos del supermercado, reservas 2x1 de viajes o menús degustación para dos. La vida no parece diseñada para los solteros y eso, aunque hagamos oídos sordos, genera un mensaje que acaba calando. ¿Cómo podemos combatirlo? Fácil: ni perpetuándolo ni consintiéndolo.

  • 1. Apoya las decisiones de ruptura ajenas: ¿cuántas veces el final de un caminó dio paso a nuevas y mejores aventuras? ¡Muchas, muchísimas! Apoya la valentía de los que se atreven a dar un paso para sí mismos, para encontrarse y para sentirse plenos de una forma distinta. Aunque las rupturas suelen ser tristes, a la larga, salir de una relación que no conviene es la mejor decisión.

  • 2. Reduce la presión social al salir de fiesta: no, no todas las veces que se sale es con el objetivo de volver a casa acompañado. A veces a tu amiga soltera le apetece simplemente pasar un buen rato sin más, como lo hace cualquier persona en pareja. La soltería no es un problema que se deba remediar. Tú relax, que ellas marcarán su ritmo.

  • 3. Evita cuestionar la soledad ajena: porque lo que uno percibe como un periodo solitario y triste, para otros es uno de los momentos más productivos y placenteros de sus vidas. Ahórrate el mensaje compasivo porque podrías tener delante a una persona perfectamente consciente y segura de sus necesidades emocionales.

A palabras single shaming, oídos sologámicos

La revolución del  self-care y del cuidado de la salud mental y emocional está poniendo en jaque todas las reglas del juego (también las del discursito de la complacencia que sacrificaba las preferencias propias para cumplir con las expectativas del resto). En tiempos de sologamia, el refrán que nos prefiere solos antes que mal acompañados empieza a agarrar con fuerza. Resulta que las personas están empezando a escuchar sus necesidades y… ¡Sorpresa! No todo el mundo se siente más cómodo ni más completo estando en pareja.

La sologamia y la decisión de vivir una vida plena en soltería es una decisión tan válida como cualquier otra, y si no que se lo digan a los islandeses, que hasta han inventado el concepto ‘Eingleði’ para referirse a la alegría de estar soltero. Siendo ellos unas de las sociedades más felices del mundo, ¿quién somos nosotros para negarlo? Llámalo Eingleði o llámalo sologamia, esta tendencia recoge la idea de que la soltería ha dejado de ser una limbo emocional para convertirse en un estatus elegido, pleno y consciente.

Y entonces… ¿la pareja para cuándo?

¡Para cuando realmente apetezca y surja! Porque estar felizmente soltero no significa vivir cerrado al amor. De hecho, es común que cuanto más nos escuchamos y nos conocemos a nosotros mismos, más honestos somos con lo que buscamos y más intensas experiencias vivimos. Si prefieres la calidad a la prisa y lo tuyo es tener intercambios auténticos, la app de citas adopte te espera para cuando tú misma te lo pidas. ¡Tu soltería, tus reglas!

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